Homenaje a brigada médica cubana en Rancagua

El 4 de marzo a las 12 horas se inaugura en Rancagua una placa de homenaje a los médicos cubanos que durante un año socorrieron a los habitantes de la ciudad después del teremoto. La brigada médica cubana "Henry Reeve" desarrolló una labor considerada inolvidable por los rancagüinos y que no ha sido suficientemente destacada en el país: son los únicos voluntarios extranjeros que permanecieron por doce meses trabajando en Chile. Al acto invitan el alcalde Eduardo Soto Romero; Danilo Jorquera Vidal, Concejal y Presidente de la Comisión Internacional
de la I. Municipalidad de Rancagua y el Comité de Solidaridad con Cuba en Rancagua. La placa se instalará en el gimnasio del Complejo Deportivo Patricio Mekis de esa ciudad, donde funcionó el hospital de campaña.
La Brigada Henry Reeve es un Contingente Internacional de Médicos Especializados en Situaciones de Desastres y Graves Epidemias. Surgió como parte de la ayuda humanitaria que los médicos cubanos en representación del pueblo de Cuba le ofrecían al pueblo de los Estados Unidos tras el paso del huracán Katrina por el sur de ese país el 29 de agosto de 2005. La brigada lleva su nombre por el patriota neoyorkino Henry Reeve que cayó luchando por la independencia de Cuba de los españoles.

En Chile trabajaron cirujanos, pediatras, traumatólogos, intensivistas, enfermeras, epidemiólogo, un auxiliar de laboratorio y un cocinero con dos hospitales de campaña, uno en Rancagua, y otro en Chillán. Trataron casos de traumatismos, cirugías de apendicitis y colecistitis, consultas de pediatría y de medicina interna.
Sus pacientes estaban asombrados y agradecidos por la calidez en el trato de los médicos cubanos, tremendo contraste con lo que ocurre en Chile en la mayoría de los hospitales públicos.

La edad promedio de los voluntarios se acerca a los 45 años. En el gimnasio los brigadistas no sólo atendían a los pacientes, sino también vivieron en mediaguas facilitadas por la FACH con unas carpas para que usaran de dormitorio. En los primeros cuatro meses realizaron más de 42 mil atenciones y 1.500 cirugías.

Según una crónica de La Tercera publicada tiempo atrás, en su tiempo libre los brigadistas "impartían clases de salsa a sus pacientes y colegas chilenos. A lo cubano."