domingo, marzo 29, 2020

Paulina Aguirre en la Cuarentena con Memoria



Paulina Aguirre Tobar  fue una joven combatiente del MIR, estudiante del vespertino del Liceo Valentín Letelier de Santiago, ejecutada a los 20 años por la CNI con ocho balazos, dos de ellos en la cabeza, el 29 de marzo de 1985. Cuando ella regresaba a la cabaña que arrendaba en El Arrayán,  la policía secreta de Pinochet la esperaba.  El crimen se presentó como un  enfrentamiento. Alvaro Corvalán  estuvo al mando del operativo. La justicia apenas le sentenció a 5 años y 1 día de cárcel por el crimen. Varios de los perpetradores no cumplieron prisión efectiva.
El asesinato de los hermanos Rafael y Eduardo Vergara, ocurrido exactamente en la misma fecha, se conmemora hace ya más de una década como el Día del Joven Combatiente. En 2011   algunos pingüinos –principalmente mujeres- comenzaron a reivindicar y recordar en las marchas y tomas a Paulina Alejandra Aguirre Tobar. Este 29 de marzo la Coordinadora Feminista evocó su figura en la intervención urbana llamada #ProyectamosMemoriaCombatiente, memoria feminista y rebelde,  con videos desde balcones, terrazas o ventanas para mostrar que las feministas no olvidamos, para exigir el fin de la violencia política sexual y para mostrar que somos la primera línea contra el terrorismo de Estado.
A ella le gustaba dibujar y tocar la guitarra.  Componía canciones y escribía poesía.  Desde pequeña, durante el gobierno de Allende, había acompañado a su padre a a vender El Rebelde, el periódico del MIR, en fábricas y poblaciones. En dictadura,  vivió en su propia familia los crímenes. Uno de sus tíos, “Chino Alvarez”  fue fusilado en Antofagasta; su papá, Luis Aguirre, fue torturado en Calama y encarcelado en Santiago para después ser expulsado al exilio. Paulina comenzó a militar a los  15 años.  Tras el retorno clandestino a Chile de Luis desde Francia, el padre se convirtió en su referente inicial. Por eso en la resistencia ella se llamó “Luisa”.  Ella tenía muy claro la injusticia que vivía Chile, y  quería liberar al pueblo de de la dictadura brutal encabezada por el tirano Augusto Pinochet.
Su padre recuerda que la única falla de “Luisa” a las normas de seguridad fue retrasar en una oportunidad su regreso al hogar después de hacer un contacto. Su explicación fue que había ido a una cita con su pololo de entonces, y lloró horas por haber generado tanta inquietud en la familia. En aquellos tiempos, si una persona no  llegaba a la hora acordada,  se presumía que había caído detenida.
Tras el terremoto del 3 de marzo de 1985, Paulina se fue a casa de sus abuelos, en Macul, porque la dueña de la cabaña de El Arrayán en que vivía, decidió hacer reparaciones en las instalaciones, que tenían una grieta. El hallazgo de un escondite de municiones  al interior de un muro (un  “barretín” ) por los maestros, fue denunciado por la dueña a los militares. Así se inició la tragedia y  el recinto de El Arrayán se convirtió en una trampa mortal.
En la resistencia armada
Paulina había cumplido delicadas tareas a comienzos de los años 80, tales  como ser enlace o correo para la instalación de la guerrilla de Neltume, recibiendo en el sur a los retornados que venían a integrarse al proyecto guerrillero abortado en 1981. Tras el aniquilamiento del proyecto de guerrilla rural, Paulina, siguió en la resistencia armada urbana y la lucha político-militar. Arreciaba la persecución al MIR y la Resistencia, por lo cual ella vivió en la clandestinidad entre 1980 y 1985, adiestrándose en Cuba en técnicas de guerrilla urbana  y fabricación de armamento.  Allí se hizo un aborto, porque  ella y su pareja habían decidido tener hijos sólo cuando triunfase la revolución. Regresó a Chile y su padre no tiene mayor información sobre sus tareas en el período. Cuando Paulina fue asesinada, Luis Aguirre ya no estaba en Chile.
Mujeres y Resistencia
El padre expresó al medio CiudadInvisible.cl: “Hasta hace 8 o 5 años mi hija estaba muy presente en las campañas del Joven Combatiente. Después su figura quedó fuera, la única representante femenina; dejaron solo a los varones. Esto me incomodó totalmente … Yo soy un poco feminista, hay que resaltar el aspecto femenino de la resistencia,  de los cientos de compañeras que murieron en resistencia…Hoy Paulina me acompaña, me da fuerza. Fue valiente, asumió la lucha, sacrificó la vida que podía haber tenido como cualquier niña, por una vida de secreto y mortal peligro. Yo era el ejemplo de ella antes; ahora ella es mi ejemplo”.
Los combatientes de hoy
En un texto reciente, Luis Aguirre resalta la importancia de  compartir  esta historia y la de otros jóvenes combatientes como los hermanos Vergara Toledo y Mauricio Maigret (caído en Pudahuel protegiendo la retirada de sus compañeros)  con los (as) muchachos(as) jóvenes de la Primera Línea “que desde el levantamiento ciudadano ocurrido 18 de octubre han demostrado valentía solidaridad moral y ética combativa, creativa y ofensiva en contra de las fuerzas represivas.”
El padre recuerda a Paulina  homenajeándola hoy “Por continuar, por jamás rendirse”. El concluye citando uno de los últimos poemas que Paulina le dejó, antes de ser acribillada: «Cuando el dolor/la sangre, el odio y la muerte/son necesarios/miles de manos se tienden/para tomar las armas/Acuérdense ustedes de mí/Siempre».  
(con textos de Luis Aguirre y notas en Punto Final, El Mostrador, Ciudad Invisible y Memoria Viva).  


viernes, marzo 13, 2020

Crímenes contra los DD.HH. y Renegociación del TLC Chile-Unión Europea


Declaración Pública
Santiago, 11 de marzo
Como Plataforma Chile Mejor sin TLC, hacemos un llamado al Consejo de Estados Miembros de la Unión Europea; a su órgano ejecutivo, la Comisión,  y al Parlamento Europeo que representa a los ciudadanos y ciudadanas, a hacer valer el respeto a los DD.HH. y detener inmediatamente la negociación de la modernización del Acuerdo de Asociación entre la Unión Europea y Chile en vigor desde 2003, solicitada en La Moneda el pasado 4 de marzo por el Presidente Piñera a los embajadores de la UE en Chile . En esa conversación se ignoró el macizo reporte de la delegación del Parlamento europeo que visitó Chile en octubre de 2019 elaborado a partir de la información recogida en  intensas reuniones con representantes de organizaciones de DD.HH., y organizaciones sociales y políticas en Santiago y Valparaíso. La sexta reunión de las partes se realizó en noviembre de 2019, sin importar el estallido social. A la fecha de la reunión de marzo, ya eran públicos los informes de Amnistía Internacional, Human Rights Watch, ACNUDH, y del Instituto Nacional de DD.HH., acerca de las ininterrumpidas y gravísimas violaciones a los derechos humanos en curso. Los asesores ocultaron otro dato relevante: hoy los tratados de libre comercio son ampliamente cuestionados por las y los movilizados en la revuelta popular, dada la inexistencia de una evaluación integral de sus impactos y su carácter de pilar del modelo neoliberal impuesto por la constitución pinochetista que aún rige Chile.  Como ejemplo, citamos la campaña virtual en curso "Chile, ¿Agua o Aguacates?" sobre los costos de la agroexportación. La campaña es global y pide firmar por la derogación del Código de Aguas (1981), la restricción al cultivo de paltas y acceso al agua potable y de riego para las comunidades de Petorca, Chile.
Violación sistemática de  los DD.HH.
La Fiscalía Nacional registraba a fines de enero 31 muertos en el contexto de protestas. Los últimos meses la cifra de muertos ha seguido aumentando. El informe oficial  dado a conocer por el Instituto Nacional de DD.HH. para el período comprendido entre el 18 de octubre de 2019 y el 18 de febrero de 2020, reporta un total de 3.765 personas heridas (entre ellas 439 mujeres y 282 niños, niñas y adolescentes)y  411 traumas oculares. De las 2.122 heridas por disparos, 500 fueron por balas, 190 por balines, 271 por bombas lacrimógenas,  1.681 por perdigones y 200 sin causa identificada. El INDH ha presentado 1.312 acciones judiciales con escaso avance,  entre ellas 5 por los  homicidios cometidos por agentes del Estado;195 querellas por violencia sexual (violaciones, entre otros abusos) y 951 por torturas.  La Coordinadora por la Libertad de las y los Presos Políticos de la revuelta, cifra en más de 2000 los detenidos, muchos de ellos menores de edad.
El proceso de renegociación del Tratado con la UE se inició en noviembre de 2017,  con la habitual falta de transparencia. Los negociadores de la Unión Europea abocados a la tarea,   no pueden alegar hoy desconocimiento de la crisis de derechos humanos que  se vive en Chile. Tras conocer el completo informe elaborado por la delegación del Parlamento Europeo que visitó Chile en octubre en pleno estado de emergencia y con los militares en la calle, 40 diputados de la entidad dirigieron una carta a la entonces Alta Representante de la Unión para Asuntos Exteriores, Federica Mogherini (cuyo puesto ocupa hoy Joseph Borrell), solicitándole  entre otras medidas, “que en el marco del diálogo político, la UE …solicite una reunión urgente con la Embajada de Chile ante la UE…y  haga valer la cláusula de democracia del Acuerdo de Asociación que mantiene la Unión con Chile (Acuerdo de Asociación Económica, AAE), donde se establece el respeto de los derechos humanos fundamentales, el desarrollo económico y social sostenible; y compromete además a las partes con la buena gobernanza.” Demandaron  asimismo los diputados que, de no haber cambios en la situación denunciada por las organizaciones sociales y de derechos humanos de Santiago y Valparaíso reunidas con la misión europea, la UE debe aplicar “la cláusula de suspensión del acuerdo en razón de incumplimiento de la cláusula de democracia.”  Como ocurre en los tratados con todos los puntos que no tienen que ver directamente con el comercio, el capítulo de derechos humanos no es vinculante para los Estados, como sí son los capítulos sobre propiedad intelectual o resolución de controversias, entre otros. Sin embargo la UE tiene ahora la posibilidad de actuar en consonancia con sus principios y su propia legislación de Derechos Humanos.

A su vez, el 30 de octubre la vocera de la Comunidad Europea para Asuntos internacionales y Negociaciones, Maja Kocijancic declaró sobre el caso chileno: “Deploramos la pérdida de vidas y rechazamos cualquier tipo de violencia. Debe investigarse debidamente toda violación de los derechos humanos, que deben respetarse en todas las circunstancias.” 
El 22 de enero de 2020 expusieron en la Subcomisión de DDHH de la UE  sobre la situación en Chile, el académico Claudio Nash, director de la cátedra de Derechos Humanos de la Universidad de Chile y Patricia Parga, por el comité de DD.HH. 18.10 de la red “Chile Despertó Internacional”, creada por chilenos expatriados. Nash sostuvo en su intervención que “ las violaciones descritas   configuran  un   cuadro  de    graves,   masivas y   sistemáticas violaciones de  derechos humanos. …Además, el  Gobierno se ha empeñado en una agenda legislativa que busca criminalizar la protesta ciudadana y el  Parlamento chileno no ha sido capaz de  controlar y limitar dicha criminalización.” Patricia Parga por su parte recordó que Chile fue el  primer país de  América Latina que firmó un acuerdo de  libre comercio con la Unión Europea, pero agregó “¿Qué sentido tiene  incluir  una  cláusula sobre DD.HH.,  creada  especialmente  para  ser  aplicada en contextos como el señalado… que no obliga a las partes a respetarla?” Concluyó llamando a las instituciones europeas a dejar su silencio cómplice y condenar las graves, masivas  y  sistemáticas  violaciones a los derechos humanos cometidas por el Estado chileno.

Modelo al desnudo
El estallido social detonado el 18 de octubre evidenció la enorme desigualdad existente a nivel social pero también desnudó el modelo económico neoliberal, sostenido por el extractivismo y los tratados de libre comercio. Al calor de la revuelta, ambos factores han sido reconocidos como determinantes en el deterioro ambiental y la vulneración de derechos básicos a la educación, la previsión, la salud, entre otros. Ya en 2018 alertábamos que Chile no puede seguir teniendo relaciones de tipo colonial con la UE,  y llamábamos la atención sobre los impactos negativos que preveíamos respecto de la continuidad del Tratado de Asociación con la UE. El nuevo texto ahora con acento en la energía y la propiedad intelectual,  acentúa el rol proveedor de Chile de materias primas como cobre, litio (en que Chile es el principal proveedor para la industria automotriz europea), frutas, salmón, semillas,  profundizando así el saqueo de los bienes comunes, la depredación de territorios y el despojo de comunidades en el área minera. En materia de resolución de controversias, los riesgos son similares a los que presenta el TPP11 ya que las medidas adoptadas para elevar estándares ambientales, por ejemplo, o que tengan que ver con condicionar la inversión a entrega de tecnología,  pueden ser consideradas como obstáculos al comercio y llevar a Chile a ser demandado en paneles internacionales que no cumplen con las reglas del debido proceso.   En cuanto a género, un tema de carácter no vinculante presente en los nuevos TLC y en el nuevo tratado UE-Chile,  una economía basada en la exportación de monocultivos alimentarios y forestales (celulosa), sólo traería  más impactos negativos en las mujeres temporeras, afectadas por cánceres (por  uso de agrotóxicos) y en su salud reproductiva (niños con malformaciones), y por otra parte la multiplicación de centrales hidroeléctricas de paso o de salmonicultura seguiría contribuyendo  a dejar a las comunidades campesinas e indígenas sin agua para las huertas de autosubsistencia de las mujeres campesinas e indígenas y su provisión de yerbas medicinales. Plaguicidas altamente peligrosos, como el herbicida Paraquat, prohibido en Europa, ya se usan ampliamente en cultivos de exportación incluidos los de avellanos europeos, base para la elaboración de la nutella del desayuno europeo. Estas graves vulneraciones al derecho humano a la salud integral, y al derecho a la alimentación, se suman potencialmente a las violaciones a los derechos humanos en el curso de la revuelta popular.

Un informe de la DIRECON del 2015  indicaba que mientras las exportaciones a la UE crecían anualmente en 11%, las importaciones de maquinaria y productos industriales, aumentaban un 13% anual. En 2015, la balanza comercial ya arrojó 800 millones de dólares de déficit para Chile. Estas objeciones sin duda no son consideradas válidas por el gobierno chileno, que continúa apegado a un fracasado concepto de desarrollo.
En numerosos documentos, incluidos aquellos con los que inició la renegociación del Acuerdo de Libre Comercio con Chile, la Unión Europea se presenta ante la sociedad civil con una sólida adscripción a los derechos humanos. Los principios, sin embargo, deben ser coherentes con la práctica. Por ello, con la autoridad que nos confiere un pueblo consciente de sus derechos y con el dolor de nuestros caídos y caídas en la revuelta popular,  demandamos a la Comisión Europea, órgano ejecutivo de la UE,  en su misión de defensa de los tratados de la Unión, y al Consejo de la UE, que instruyan el cese inmediato de la renegociación del Acuerdo de Asociación entre la Unión Europea y Chile, cumpliendo así con la legislación de DD.HH. de la UE, la Declaración de DD.HH. de la UE y el Tratado de Lisboa, y aplicando el mismo estándar para su socio comercial. El Parlamento Europeo está llamado a controlar que la Comisión Europea lo haga.  Asimismo,  llamamos a los chilenos y chilenas del Comité18.10 a apoyar esta demanda para aislar  al gobierno del Presidente Piñera, que escogió el camino de la criminal represión a su pueblo y pretende seguir imponiendo nuevas leyes y tratados  como si contara con respaldo ciudadano.