domingo, septiembre 30, 2007

¿Otro tipo de femicidio? Lonko Juana Calfunao y su hermana en riesgo vital


Tras más de 50 días de huelga de hambre, la lonko Juana Calfunao y su hermana Luisa, recluidas en la Cárcel de Mujeres de Temuco, presentan compromiso severo de salud y en el caso de Luisa, riesgo vital. Ellas y otros ocho mapuche serán sometidos a juicio oral el próximo 22 de octubre, pero no se sabe en qué condiciones estarán para esa fecha. El informe fue evacuado por la doctora Ociele Núñez, médica privada, que examinó a las huelguistas a petición de Carolina Landero Calfunao y Carlos Acosta, hijos de las presas políticas mapuche. Waikilaf, el hijo mayor de Juana, no puede visitarla: cumplirá sus 27 años el 1º de octubre en la Cárcel de Alta Seguridad de Santiago. El siguiente es el parte médico evacuado el 29 de septiembre sobre las comuneras, luego de ser sometidas a examen clínico en una sala cualquiera del penal, por no estar disponibles las llaves que permitieran el acceso a la enfermería:
“La Sra Juana (51 años) luce con gran pérdida de peso, tos persistente, hemodinámicamente estable, pero con frialdad y palidez de su piel y mucosas. Presenta un cuadro de bronquitis obstructiva, que es imprescindible revertir a la brevedad. Se la ve agobiada y con irritabilidad emocional, pero sin compromiso neurológico aún. ”
El informe describe como más preocupante el estado de Luisa Calfunao (41 años), que no pudo llegar por sus propios medios al lugar del examen. Reporta la doctora Núñez:
“Luce francamente comprometida de salud, muy enflaquecida, con disminución severa de su masa muscular, evidenciada por disminución del deltoides, y de ambos cuadriceps, destacando los huesos, ha bajado aproximadamente 10 Kg lo que representa una baja del 13% de su peso, con riesgo de desnutrición severa, palidez de piel muy acentuada, piel delgada, seca y fría, neurológicamente consciente, orientada, pero agotada y gran sobrecarga emocional. Temo por su vida. De permanecer en esta situación, el riesgo de su vida es inminente por posibles alteraciones cardiorrespiratorias, renales, inmunológicas, gastrointestinales. Además, la disminución de la temperatura corporal, dado por el ayuno, contribuye frecuentemente a la muerte.”

Entre las demandas de Juana Calfunao y su hermana están el reconocimiento de la calidad de Prisioneros Políticos a todos los Mapuches encarcelados por defender su territorio, y que se les dé garantías de seguridad física y psicológica.

Incumplimiento oficial
Estas demandas fueron extensamente discutidas con autoridades de la región, encabezadas por Christian Dulansky Araya, Secretario Regional Ministerial de Justicia hace más de un mes. En la oportunidad hubo un compromiso oficial de avanzar en el cumplimiento de estas demandas, lo que no se ha materializado.
Las demandas de las mujeres mapuche incluyen el reconocimiento como autoridades ancestrales a los detenidos que tengan esa calidad conferida por su comunidad,
y el cese inmediato del maltrato, hostigamiento y amedrentamiento por parte de gendarmería de Chile.
Finalmente, la huelga de hambre busca poner término a la desarticulación, desarraigo e incomunicación en que hoy está la familia Calfunao, y su comunidad Juan Paillalef, que tiene prohibición de visitar y ser visitados por los familiares libres, que son la abuela e hijos y hermanos.
Una de las demandas de las huelguistas respecto de la situación de salud del werken Cadin ha sido cumplida parcialmente, ya que el próximo miércoles 3 de octubre, en el hospital penitenciario de Santiago, el werken Antonio Cadin será sometido a una intervención quirúrgica que venía requiriendo desde largo tiempo y para lo cual fue trasladado a la capital cinco días atrás. Su hijo Waikilaf, también preso, no podrá verlo, por estar recluido en la Cárcel de Alta Seguridad.

Denuncia de la Comisión Etica

A este informe médico se suma la denuncia realizada a comienzos de septiembre por Vicente Maniqueo y Enrique Pérez, Ricardo Frodden, Enrique Núñez y Nelson Aramburu, dirigentes regionales y nacionales de la Comisión Etica Contra la Tortura, quienes luego de visitar a los presos mapuche en las cárceles de hombres y mujeres en Temuco, denunciaron las condiciones de inseguridad y hostigamiento que se viven en ambos recintos y la agresión sufrida por Ernesto Lincopan, agredido con arma blanca por un reo. Ellos constataron que son seis los integrantes de la familia Calfunao Cadín detenidos. Sólo quedan en libertad las hijas y la madre de Juana Calfunao. “Esta situación –dice la Comisión Etica- demuestra la existencia de un cuadro de amedentramiento y persecución contra la comunidad de esta familia y los luchadores mapuches en general, en que se utiliza todo el aparato del Estado para mantenerlos en prisión, separarlos de su entorno y negarles derechos básicos de todo ciudadano y procesado”.
Juana Calfunao y su hermana permanecen encarceladas a la espera de un nuevo juicio oral cuya fecha aún no se ha determinado. En el juicio anterior el tribunal prácticamente la absolvió de todos los cargos más graves, y estaría en libertad si no se hubieran mantenido las medidas cautelares que impiden su libertad condicional. El fiscal está pidiendo cinco años de prisión no remitida para la lonko, y tres para su hermana. Ellas están presas desde el 15 de noviembre de 2006.
En una carta abierta, Juana Calfunao expresó el 28 de septiembre: “Preferimos morir de pie, firme en nuestros ideales, a vivir sin dignidad y al amparo de este gobierno corrupto y sin moral. La cárcel no encarcela los ideales y el espíritu de lucha. Por el contrario, nos fortalece, porque encarceladas, no se acaba nuestra lucha.”

jueves, septiembre 27, 2007

El Preso Nº 58866




Con este título me vienen a la memoria las notas de “El Preso Nº 9”, una clásica canción mexicana, que hablaba de un hombre al que iban a fusilar. Pero ¡nada que ver! Ese preso, del que hablaba el bellísimo tema interpretado por Cuco Sánchez o por Joan Baez varias décadas atrás, estaba condenado por un femicidio. En realidad creo que en este tiempo nadie le haría una canción. Me estremece cada nueva noticia que casi diariamente anuncia la muerte de una nueva mujer a manos de su pareja, marido o conviviente, un hecho que retrata la despiadada y sexista sociedad en que vivimos.

Sin embargo este preso, Kurt Julius Goldstein, al que le rindo homenaje sincero sin haber tenido el honor de haberlo conocido, llevaba el número Nº58866 tatuado en su brazo izquierdo. Este símbolo vivo de la lucha contra el nacismo, falleció el pasado lunes 24 de septiembre en Berlín, a los 92 años. En el campo de concentración de Auschwitz, los nazis lo habían marcado con ese número en su brazo derecho, como quien marca a una bestia. Pero este hombre era de aquellos que constituyen el escalón más alto de la especie humana, era un combatiente internacionalista y sobreviviente de los campos de concentración nazis. A consecuencia de la persecución contra los judíos alemanes se había exiliado en Francia, pero se alistó en las Brigadas Internacionales cruzando la frontera cuando Franco dio el golpe militar en España. Asi, luchó en la guerra civil española, teatro de operaciones de la primera batalla contra el fascismo en Europa. Derrotada la República, Kurt Goldstein regresó a Francia, donde fue internado en el campo del Vernét donde se encerraba a los “individuos peligrosos para el orden público y la seguridad nacional”, en general comunistas y dirigentes de las Brigadas Internacionales. Los internados en los campos del sur de Francia sufrieron rápidamente las consecuencias de las cada vez más estrechas relaciones del gobierno de Vichy con el régimen nazi. Goldstein estuvo entre los alemanes deportados al campo de exterminio de Auschwitz, donde pasó 30 meses de cautiverio.
Conducido en la “marcha de la muerte” hacia el campo de Buchenwald, el combatiente internacionalista fue liberado el 11 de abril de 1945.
Como sobreviviente y estandarte de la memoria, era Presidente del Comité Internacional de Auschwitz y fue distinguido con la Cruz del Mérito Alemán. En el año 1996, junto al resto de los miembros de las Brigadas Internacionalistas, obtuvo la nacionalidad española.

¡¡¡Gracias Preso Nº 58866!!! tituló el periódico "Junge Welt" el día que se conoció la noticia de su partida de este mundo. Kurt Goldstein, nacido en Dortmund, Alemania, había sido dirigente de las juventudes comunistas y del Partido Comunista Alemán. Hasta sus últimos días estuvo en primera línea en la lucha contra el nazismo redivivo hoy y participaba en la denuncia de quienes intentan permanentemente ocultar las redes facistas que aún perduran en Alemania.

Mis amigos chilenos de Berlín, que me han permitido conocer la notable historia de este combatiente antifascista, consideraban a Goldstein un referente por su internacionalismo, consecuencia y humildad y además por su incesante lucha frontal contra esa izquierda que claudica y negocia su verdadera historia. Su internacionalismo lo había llevado a conocer personalmente el proceso de la Unidad Popular en Chile de los 70`. Según estos amigos, conversar con él - que hablaba un perfecto español - era como asomarse a un inédito libro abierto que comunicaba la historia no escrita en los textos oficiales. “Ese magnetismo de su discurso y el atractivo de su charla estaba sin duda basado en la consecuencia política-humana de este combatiente, bajo de estatura pero enorme en transparencia y claridad”, aseguran ellos que registraron su testimonio, y se inclinan hoy ante este protagonista de la otra historia, esa que registra las luchas y esperanzas de hombres y mujeres dignos y que necesitamos compartir aquí, allá y donde sea, globalizando también la memoria de la resistencia de los pueblos contra la opresión.

domingo, septiembre 23, 2007

Marcela y su máquina de escribir Olivetti



En la foto, mi prima Marcela, desaparecida en junio de 1974 a los 18 años. Hoy domingo 23 planté un rosal en su memoria en Villa Grimaldi/Parque por la Paz. La placa de cerámica con su nombre, está inserta en una varilla metálica a la cual le amarré una tirita que tejí a crochet con lana rojinegra, y una pulsera con 18 semillas rojas y negras. Semillas, como ella misma. El brazalete es pequeño y finito, de semillas de huayruro (chumico en Costa Rica) que son negras en una mitad y rojas en la otra. Semillas como Marcela misma lo es, una semilla. Traje la pulsera de Perú en marzo con un collar que hace juego y se la puse a Marcela en un gesto íntimo, medio kitsch quizás, de ruptura de la simetría de placas y rosales, ordenados en círculos sucesivos, que me permití pensando que no hay sepultura y por tanto no hay otra leyenda tampoco... Imagino a Marcela le gustaría. Yo igual conservo el collar de ese juego de huayruro, que estrené para la ocasión. El rosal de Marcelita (como le dice Blanca) quedó justo al lado del de María Galindo, desaparecida el año 76. ¡Sincronicidad: Lo planté yo misma! Fue en enero de este año, al inicio del proyecto (ver nota de ese mes aquí mismo). María era también compañera nuestra, trabajó conmigo en la clandestinidad y también era sureña, de Lota.

En los cementerios populares como el que está en La Florida, alguna gente lleva sus juguetes a sus “angelitos”; a veces hay avioncitos, o ponen incluso banderas, remolinos y escarapelas tricolores para el 18... y los mapuche tejen guirnaldas de papel y de maqui u otro árbol cuando visitan a sus muertos y comen asado y toman alegremente con ellos.

En la ceremonia de hoy Gilda Bottai, soprano lírica chilena de la Opera de Berlín y ex presa sobreviviente, interpretó entre otras canciones “Hijo de la luna” con una voz potente y hermosísima que también brindó a “sus hermanos y hermanas desaparecidas” el Ave María de Bach Gounod. Un audiovisual mostró imágenes de las compañeras. Esta es la segunda parte del proyecto que busca reponer el rosedal de la ex Villa Grimaldi homenajeando con una planta florida a todas las mujeres desaparecidas o ejecutadas en dictadura. Es extraño todo. Por circunstancias familiares hoy superadas, no nos conocimos realmente antes con Marcela, pero hoy la siento conmigo y eso me ha acercado mucho a su madre, Blanca -viajera y errante siempre - y a su hermano mayor, Juan, que ancló en Costa Rica.
Nadie vio nunca a Marcela en prisión. Pero sí se sabe que Osvaldo Romo llevó a esta estudiante mirista de 18 años –parralina de origen, como toda mi familia- a la localidad rural de Lampa, al noreste de Santiago, luego de detenerla. En la mañana del 26 de junio de 1974, el torturador y otros agentes de la DINA llevaron a Marcela Soledad Sepúlveda Troncoso hasta la parcela Nº 3, domicilio de la familia García Urrea. El padre de Marcela, Juan Sepúlveda (mi tío Cano, hermano de mi papá) y su prima, Tita, que se había criado con ellos desde niña, habían buscado refugio allí a raíz de la detención de mi tía, Blanca Flor Troncoso, madre de Marcela, a fines de mayo. Ante la dueña de casa, los agentes se hicieron pasar por “amigos” de Marcela, y subieron al segundo piso, donde estaba el dormitorio de la estudiante de Audiofoniatría de la Universidad de Chile. Cuando bajaron, ella llevaba en la mano un chaquetón, su máquina de escribir Olivetti - como la que mi hija Eva María guarda y era de su padre, ejecutado tres años después de la desaparición de Marcela -, y un stencil, o plantilla, de aquellas que se utilizaban entonces para imprimir propaganda en un mimeógrafo. Quizás tenía “picado” en su Olivetti, el texto de un volante llamando a unirse a la resistencia popular.

Marcela ese día entró a la cocina, donde estaba la dueña de casa, Elena Urrea de García. Tomó un cuchillo de la mesa, vaciló y luego lo dejó. La señora Elena le dijo: “Quédate, Marcelita”. Ella la abrazó, respondiendo: “No puedo”. Y se la llevaron en la misma camioneta roja, sin patente, en que habían llegado. Los hechos narrados figuran en la declaración prestada por la señora Elena ante el grupo 5º de Investigaciones, en abril del año 2000. Allí también constan los dichos de Tita Pino, que se presentó por primera vez a declarar en esa oportunidad, relatando que el día anterior a la detención, Romo visitó el emporio de tío Cano, en Almirante Acevedo 5220, comuna de Vitacura, con el pretexto de llevar dinero y comida para su esposa Blanca, trasladada al Estadio Chile, luego de haber sido torturada en Londres 38. En la puerta, Romo preguntó a Tita: “¿Así que estás metida en política?” Y la joven respondió: “Yo no, es Marcela la que está metida”.

Una situación equívoca
La detención de Marcela nunca fue reconocida por la dictadura. Con su madre en prisión en Tres Alamos, no hubo denuncias inmediatas. Romo confundió a la familia con llamadas telefónicas atendidas por Tita, quien sostenía luego ante tío Cano que Marcela estaba a salvo. Tita abandonó el liceo donde estudiaba y posteriormente se fue a vivir al norte.
Blanca Troncoso fue expulsada en marzo de 1975, luego de diez meses de detención, con destino a Costa Rica, país que la acogió con su marido y el hijo mayor, Juan que los había precedido. Viajaron creyendo que su hija estaba a salvo en la clandestinidad. Al confirmarse la detención y desaparición de dos jóvenes vinculados políticamente a Marcela: Eduardo Humberto Ziede (el “Flaco Santiago”) y Agustín Reyes (el “Gato” de Ñuñoa) Blanca recurrió a Amnistía Internacional y al Consejo Mundial de Iglesias para esclarecer la suerte de su hija. Blanca Flor tuvo prohibición de ingresar al país hasta 1988. Sus gestiones desde Canadá, así como los recursos de amparo y la denuncia por presunta desgracia entablados por amigos de la familia no tuvieron ningún resultado. El Ministro Servando Jordán revisó la causa interpuesta en el noveno Juzgado del Crimen, cerrándose en 1981 el sumario, en resolución confirmada por la Corte de Apelaciones el 22 de diciembre de 1981. El año 2001 Blanca se querelló contra Augusto Pinochet, Krasnoff, Romo y otros. La causa que inicialmente tuvo el juez Guzmán, y antes, la jueza especial Raquel Lermanda, está en manos del ministro Alejandro Solís, pero no pasa nada. No ha habido ninguna encargatoria de reo, fundamentalmente por la falta de testigos directos que aporten antecedentes. Romo murió sin reconocer su participación en este crimen y Contreras, en su última carta pública, considerada en medios judiciales como una nueva maniobra, reconoció su detención agregándola a las listas de sepultados como NN en el Patio 29. Por primera vez el nombre de Marcela fue mencionado por un criminal de la DINA. Pero hasta ahora no hay justicia ni hay verdad en la desaparición de la joven universitaria.

Dos hermanos unidos
Hasta el año 73, los dos hijos del matrimonio Sepúlveda Troncoso habían sido miembros del FER, brazo estudiantil del MIR. Marcela egresó del Liceo Nº 7, donde participaba en el centro de alumnos, y su hermano lo hizo, del Liceo Victorino Lastarria. Aunque cada uno tenía actividades políticas por su cuenta, analizaban apasionadamente los sucesos de la época que vivían. En una oportunidad Marcela integró una delegación de la Federación de Estudiantes Secundarios FESES que tuvo una audiencia con Salvador Allende, cuando éste era ya presidente electo, y recibió a los jóvenes en su casa de Guardia Vieja. El hogar de los Sepúlveda Troncoso, tenía el calor de la gente de provincia y allí llegaban los amigos y compañeros de sus hijos, entre ellos Carlos Freddy Pérez Vargas. Al ser detenida, Blanca fue acusada por la DINA de haber atendido en su peluquería al mirista Agustín Reyes – de la estructura que trabajaba en Ñuñoa- también desaparecido en 1974.

Marcela y el Ché
Su compañera de estudios en el Liceo 7, Alejandra, recuerda: “Admirábamos al Ché, y en ocasiones leíamos sus escritos. Eramos exigentes con nosotras mismas y con los demás, tratábamos de ser consecuentes con nuestras ideas políticas. Ella era muy generosa, franca, directa y también muy racional”. Marcela era de carácter reservado, y le gustaba escribir. No tenía pololo y su amiga Alejandra cree que esperaba todavía conocer al compañero ideal. Cuando la madre de Marcela, Blanca fue detenida en el negocio de su marido, la primera reacción de su hija fue preocuparse de poner a salvo a otro perseguido que estaba alojado en su hogar, en el centro de Santiago.

Blanca relata que después del golpe, Marcela la convenció a ella de no irse del país, y siempre rechazó asilarse. La madre recuerda que el único signo de coquetería de su hija era hacerse “la toca” dos veces a la semana, para alisarse la negra y crespa cabellera heredada del padre. Fumaba con deleite los Lucky Strike que su padre proveía sin protestar, y bromeaba alegremente con su madre para que no la obligara a ordenar su habitación. Apoyada en el resto de la familia, utilizaba una muletilla para zanjar la discusión: “La correlación de fuerzas no es favorable para usted, mamá: mejor cállese”. Pero también, le prometía tiernamente a su madre que cuando ella fuera profesional, vivirían juntas en un departamento en Providencia.

El segundo nombre de Marcela era Soledad.
Tío Cano murió en el exilio en Canadá en 1987. Blanca oscila entre Montreal –donde está sepultado él- , Costa Rica – acaba de nacer su bisnieta, Fiorella - y Santiago, ciudad a la que desde 1988, regresa una y otra vez. Ella ya no cree en la justicia. Blanca ahora espera. Sólo eso. Ella espera.

domingo, septiembre 09, 2007

Cuando me acuerdo de mi país



En septiembre, mes del 11 y del 18, del golpe y de las fiestas patrias, es más oportuno que nunca recordar que hay chilenos a quienes la Concertación sigue negando el derecho a vivir en la patria. En Bélgica, Solidaridad Latino http://solidaridad-latino.blogspot.com/ llamó a actuar demandando el fin de su exilio. La campaña se refiere a presos políticos condenados previamente por la dictadura de Pinochet, y re-condenados lapidariamente por el gobierno del ex Presidente Patricio Aylwin - aquel de la “justicia en la medida de lo posible”- a penas de extrañamiento o expulsión de Chile. En Bélgica, por ejemplo, reside Carlos García Herrera, condenado a 40 años de exilio, que se cumplirían el año 2032. También están en ese país Carlos Araneda Miranda que cumpliría sus 25 años de condena en 2017 junto a Hugo Gómez Peña, y Héctor Figueroa Gómez que lo harían en 2014. En Finlandia, Hugo Marchant Moya cumpliría su pena en 2017.

Solidaridad Latino también llama a actuar por el libre ingreso a Chile de los presos políticos fugados de la Cárcel de Santiago. De estos, viven en Francia, Jorge Angulo Gonzalez, Francisco Peña Riveros, Juan Carlos Cancino, Ricardo Campos, Víctor Díaz Caro y Juan Carlos Caro y en Bélgica residen Carlos Escala Illanes y Lenin Peralta. Los expatriados y los fugados tienen en común haber sido jóvenes luchadores antidictatoriales que pertenecieron al MIR o al Frente Patriótico Manuel Rodríguez y participaron en distintas etapas de la lucha antidictatorial, enfrentando en los años 80 a la poderosa represión pinochetista con audaces acciones orientadas a alentar las luchas populares y golpear a la dictadura.

El lobby en Bruselas
Solidaridad Latino es una organización de latinoamericanos residentes en Sint Niklaas, Bélgica, cuyo objetivo es promover la cultura de esta región del mundo y divulgar los problemas de América Latina. Ellos iniciaron en mayo de este año esta campaña internacional que se propone exigir del gobierno de Michele Bachelet el fin de esta violación a los derechos humanos. La capital de Bélgica, Bruselas es la capital de la Unión Europea y como tal, se desarrolla allí una intensa actividad política. Los activistas de Solidaridad Latino han hecho lobby con políticos de la Unión Europea y con dirigentes de los partidos belgas, así como con miembros del cuerpo diplomático europeo y latinoamericano. Buscan interesarlos en estos antecedentes, sorprendentes para quienes están desinformados sobre el tipo de democracia existente en Chile y sobre la herencia de la dictadura, celosamente custodidada por los gobiernos concertacionistas. El persistente lobby asociado al trabajo virtual y telefónico en redes como Cono Sur, ICAD y múltiples organizaciones de chlenos en varios continentes, se desarrolla mientras el gobierno de la Presidenta Bachelet prepara una ofensiva diplomática por un asiento en el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas para el período 2008-2012. Será difícil para el gobierno desestimar la petición de liberar del exilio a los ex presos de dictadura. En Italia se acaba de iniciar una campaña de protesta ante la noticia de que la presidenta Bachelet recibirá un doctorado honoris causa otorgado por la Universidad de Siena. La impulsan asociaciones de Solidaridad y Amistad con el con el Pueblo Mapuche, Wenuykan, Vientos del Sur Argentina, Cultura Mapuche y Radio Región XIV, con base en las ciudades de Como y Udine en Italia y Gotemburgo de Suecia (ver texto de la carta en http://it.mapuches.org/info/wenuykan070907.html)

Adhesiones en Chile
La iniciativa de Solidaridad Latino ha concitado la adhesión de varios centenares de chilenos y personalidades en Chile y el mundo, que adhirieron a la campaña vía Internet. Entre las firmas destaca la del cantautor Patricio Manns, que vivió el drama del exilio y lo cantó, entre otros versos, en su ovacionado “Cuando me acuerdo de mi país…”. El poeta Thomas Harris también suscribió el llamado con la sensibilidad propia de los artistas, y también se ven firmas de conocidos periodistas como Juan Pablo Cárdenas y Pamela Jiles. El pastor luterano Helmut Frenz, uno de los primeros en adherir a la campaña, sostuvo que no se explica cómo se puede mantener hoy este castigo y augura que el fin del exilio está próximo. También firmaron los ex dirigentes del MIR Hernán Aguiló y Manuel Hidalgo. El ex presidente del Partido Socialista Jorge Arrate MacNiven, envió una carta de apoyo a Solidaridad Latino y la revista Punto Final publicó la carta abierta en una edición pasada. Entidades de derechos humanos como CODEPU, la Comisión Etica Contra la Tortura, el movimiento por la Asamblea del Pueblo, la Coordinadora Nacional de Ex Presos Políticos y organizaciones culturales como el Taller Sol, y el Sindicato de la Editorial Siglo XXI, entre otras entidades y personas han expresado su apoyo público a la campaña. Organizaciones internacionales de derechos humanos también se han sumado a esta demanda.

Un record de la democracia
En una carta abierta que ha circulado por el mundo, Solidaridad Latino sostiene: “Cuando se han cumplido ya 17 años de ‘gobiernos democráticos’ resulta absurdo comprobar que aun existan chilenos condenados al exilio… Es paradójico recordar que la dictadura militar puso fin a la prohibición de ingreso al país luego de 15 años en el poder y que la ‘democracia’ por falta de voluntad política y decisión frente a los partidos de la oposición no desee resolver este problema que afecta a decenas de chilenos repartidos por todo el mundo.”

Los países de acogida les han permitido a estos chilenos desterrados una inserción digna. La mayor parte de ellos están casados y tienen niños en edad escolar, pero ellos quieren reencontrarse con sus raíces y visitar a su familia en Chile. Ya murieron en el exilio (belga) Juan Ordenes y Mauricio Arenas (en Buenos Aires), dirigentes del Frente Patriótico Manuel Rodríguez fugados de la Cárcel de Alta Seguridad.

Solidaridad Latina hacen preguntas que mueven a la reflexión, como las siguientes: “¿Será una deshonra para el país permitir el ingreso de los compatriotas que hicieron uso del legítimo derecho a la rebelión y emplearon todas las formas de lucha existentes para terminar con la Dictadura? ¿Será necesario castigar mucho más a los que ya pasaron años en prisión y sufrieron los horrores de la tortura?”

Los activistas de la campaña, coordinada por el ex preso político chileno Heriberto Mena sostienen en esa carta que en Europa cada año se conmemora el fin de la Segunda Guerra Mundial con desfiles en los que marchan a la cabeza los combatientes de la Resistencia, y a continuación se interrogan“¿qué hacemos los chilenos para honrar la memoria de nuestros caídos y la de aquellos que sobrevivieron a la represión militar?”

La única solución digna
El documento concluye señalando “Para muchos que hoy ocupan sillones parlamentarios o cómodas butacas en los ministerios, los Presos Políticos castigados con el extrañamiento y los fugados, siguen siendo un tema olvidado o una metáfora en la reciente historia nacional. Para otros quizás, incluso sea el gatillo necesario para terminar de una vez por todas con el problema de los Derechos Humanos y salir del enjambre judicial dictando una ley de Amnistía General para vencidos y vencedores de la guerra que iniciaron las Fuerzas Armadas con el pueblo de Chile. Sin embargo, para miles de chilenos que dimos la cara en las barricadas, en los paros, tocando cacerolas, que dejamos nuestros mejores años detrás de las rejas dictatoriales, la única solución es que el Cuarto Gobierno de la Concertación, a la cabeza de la señora Michelle Bachelet decrete una ley que ponga fin a las penas de extrañamiento sin ninguna condicionante y otorgue la libertad incondicional para todos los Presos Políticos que hoy día permanecen fugados.”

En lo personal, esta campaña me hizo pensar qué sentirán estos compañeros al escuchar la canción de Patricio Manns y sus versos:
Cuando me acuerdo de mi país
naufrago total.
Cuando me acuerdo de mi país
me nieva en la sien.
Cuando me acuerdo de mi país
me escribo de sal,
me atraso de bien,
me angustio de tren,
me agrieto de mal,
me enfermo de andén.
Cuando me acuerdo de mi país.

Cuando me acuerdo de mi país
me enojo de ayer.
Cuando me acuerdo de mi país
me lluevo en abril.
Cuando me acuerdo de mi país
me calzo el deber,
me ofusco gentil,
me enciendo candil,
me encrespo de sed,
despierto fusil.
Cuando me acuerdo de mi país...

La canción la compuso Patricio Manns en La Habana y la grabó por primera vez con la orquesta sinfónica de Cuba. Para miles de chilenos esparcidos por el mundo fue una canción desgarradoramente hermosa, un himno de amor, de lucha y de pena inmensa que que nos hacía cantarla con la voz entrecortada. Son muchas las firmas que faltan todavía para la campaña, de los que estuvimos fuera mucho tiempo o poco tiempo, pero a la fuerza, y también de los que nos añoraron y extrañaron y de todos los que sienten que vivir en Chile es nuestro derecho.
Así que si lees esto, y si has escuchado "Vuelvo" de Illapu, y si has abrazado a alguien que retornó, por favor firma en http://solidaridad-latino.blogspot.com/